Las Reglas de la meditación

Antes de nada, si quieres también puedes escuchar este capitulo aquí.

Todos sabemos que no hay juego sin reglas, y este reto no podía ser menos. Tras tener todo ya bien ordenadito en mi Google Sheets, era el momento de ponerme las bases. Sí, esas a las que acudir en los momentos en los que apareciesen las dudas, las criticas o la bajona.

Lo cierto es que esta parte fue la más sencilla, porque una vez descubierto dónde estaban mis errores, poner las reglas fue pan comido.

Aquí van mis 7 reglas de la meditación:

  1.  Póntelo fácil 🙂 Esta era la ley que marcaba todo el reto. Nada de obligaciones, de reprimendas o de pasarme horas buscando un hueco, una postura o una meditación guiada. No. Fuera como fuera, me lo tenía que poner sencillo.
  2.  Un poquito cuenta mucho  ✅ Aquí entra el tema del tiempo. ¿Que solo tengo cinco minutos? ¡Más que suficiente! Y es que 5 minutos durante toda una semana son 35 minutos y en todo un año 1.825 minutos. ¡Todo cuenta!
  3.  Por un día sí pasa algo  😤 Yo era de las que decía «Bueno, es un día. mañana me pongo» y así iban pasando días y nada… Así que la típica frase de «bueno, por un día» ¡Esta prohibida! Ponte y punto.
  4.  Procrastinación de pensamientos  🧠 Mira, no se a ti, pero cada vez que me pongo a meditar me vienen todas las listas de tareas y pensamientos filosóficos a la cabeza. Obviamente eso me distrae, por ello mi objetivo es decirles a esos pensamientos «luego te hago caso«. Sí, esta es la regla más difícil.
  5.  No hay excusas  🙅‍♀️Para meditar no necesitas absolutamente nada, ni esterilla, mallas o zafú… solo a ti. Así que no hay una excusa lo suficientemente grande para que no medites. Lo puedes hacer desde cualquier lugar.
  6.  Encuentra tu momento 📅 Me encantaría levantarme a las 5 de la mañana a meditar. ¡Qué leñes! No me encantaría, porque me gusta dormir y esas horas no existen en mi despertador. Así que lo mejor es buscar ese hueco que tu bien sabes que tienes y es el apropiado para ello.
  7.  Disfrútalo  ♥ A veces se te va a olvidar por qué haces esto, se te perderá la motivación y las ganas, por eso tendrás que hacer que este reto no sea una obligación, sino que sea fácil y lo puedas disfrutar.

Bien, con todo ello ya estoy preparada para la primera semana del Plan de Meditación. Comienzo con un tema fácil, entre comillas: la atención plena.

¡Deseadme suerte!